
En una noche despejada y lejos de "contaminaciones lumínicas", veremos la bóveda celeste cubierta de estrellas que titilan en lo alto. Tal vez nos demos cuenta que algún conjunto de ellas pareciera formar el dibujo esquemático de un objeto, o de algún animal. Eso fue lo que les pasó a las antiguas civilizaciones, y les pusieron nombres a esos conjuntos estelares.

La constelación más grande se llama Hydra y ocupa unos 100 grados en la bóveda celeste. La más pequeña es la Cruz del Sur con apenas 68 grados.
De las 88 constelaciones encontramos 12 de ellas sobre el ecuador celeste, son las constelaciones del zodiaco.